viernes, 10 de agosto de 2007

Frescas las fresas del shampoo.


Frescas como una lechuga, de hotel en hotel, de éxito en éxito, de bote en bote, de avión en jet, de alfombras en marmol, luces y reflectores. Nosotras somos felices, guapas, radiantes como el dinero y la gloria, si es que la hay.
¡Detestamos como amamos y odiamos como queremos y estallamos como caemos!